martes, 29 de septiembre de 2009

Impulsos


Qué ganas! ay, qué ganas de tomarte por el cuello y arrancarte de la boca las violencias...
Qué ganas de secuestrar tus horas, tus malos recuerdos, tus dudas, tu impotencia.
Qué ganas de violar la íntima seguridad donde guardás tu soledad, tus "para siempre"
Qué ganas de traerte cerca, de liarte a la pata de la cama, de mostrarte mi inocencia, de que me creas...
Qué ganas de forzar las reglas, los códigos, la lógica y traparme a tu balcón e instalarme en un rincón hasta que seas capaz de mirarme

Qué ganas de poder romper el tiempo, destrozarlo, hacerlo de nuevo, hacerlo bien.
Pero no puedo.